Los parientes de las víctimas del 11-S: La fe nos ha salvado

La visita del papa Francisco a la Zona Cero ha sido un signo de esperanza para quien perdió un ser querido en el atentado de las Torres Gemelas

Nueva York, 26 de septiembre de 2015 (ZENIT.org) Deborah Castellano Lubov | 0 hits

Cuando tienes el corazón destrozado, ¿cómo puedes ir adelante? Según muchos de los pariente de las víctimas del atentado al World Trade Center, del 11 de septiembre de 2001, la respuesta es la fe.

ZENIT estuvo presente en la Zona Cero en el momento de la visita del papa Francisco --que tuvo lugar este viernes por la mañana-- y tuvo la posibilidad de hablar con familiares y amigos de personas que perdieron la vida en ese trágico día.

Brendan Grady, que perdió a su hermano Christopher, comerciante de Cantor Fitzgerald, declaró que fue un honor ver al papa Francisco estar en la Zona Cero para recordarlo. “Me siento como si la tumba de mi hermano hubiera sido bendecida”, afirma Grady con sobriedad. “Nadie puede decir que la tumba de un pariente haya sido bendecida por el Papa”.

En el atentado a las Torres Gemelas, murió también David, el marido de Judy Grimmer, que trabajaba en el piso 98 de la primera Torre. Cuando supo del impacto del avión, la mujer cuenta: “Comencé a rezar inmediatamente: Sagrado Corazón de Jesús, me encomiendo a ti…’ Mi fe y mis oraciones me han impregnado cada vez más… No consigo imaginar mi vida sin la fe”, afirma la señora Grimmer.

Sobre el significado de la visita del papa Francisco para ella, Judy declaró: “Antes de conocerme, David era seminarista, por tanto es extraordinario que el Papa está aquí para él. Yo es la segunda vez que vengo aquí, la primera vez fue por el décimo aniversario, cuando inauguraron la Torre de la Libertad. Es la única vez que he ido porque siempre he querido ser positiva. No vendría nunca aquí para ver solo un agujero vacío”.

“Es maravilloso no solo porque la obra ha sido completada sino porque el Santo Padre está aquí. Yo soy una ferviente católica, como mi marido y toda mi familia y espero que todos encuentran paz con esta visita. Está marcando la diferencia en el mundo de hoy. Dios lo bendiga”.

Un hombre, antes de que llegara el Papa, habló con los periodistas de la pérdida de su hija, que era una auxiliar de vuelo de uno de los aviones que se estrelló contra la torres. Contó que la joven estaba de vacaciones pero había ido a trabajar para sustituir a una colega que estaba enferma.

También Matthew Sallitto reflexionó sobre la imagen transmitida por el Papa, y que lo que sucedió hace 14 años es la imagen del demonio.

“Perdí a mi hijo”, nos cuenta el señor Sallitto: el jóven estaba en la primera Torre y “trabajaba para Cantor Fitzgerald, que perdió la mayor parte de sus hombres ese día. Tenía 23 años, era la persona más joven del edificio. Se había licenciado en la Universidad de Vermont, después encontró este trabajo en Cantor y le gustaba”.

“Hay un profundo significado en la presencia del Papa aquí, sentimos que en este país es una ‘tierra consagrada’ porque muchas vidas se perdieron aquí ese día”, añadió, observando que “el papa Francisco muestra al mundo que ha venido a bendecir, a santificar, lo que alguno intentó hacer malvado y a destruir. Ha venido aquí a decirnos: haremos salir el bien del mal”.

Para Sallito es algo grande que el papa Francisco haya venido. “Soy católico --dice-- pero creo que todo el mundo, no solo los católicos, tengan al Papa en una consideración especial. Obviamente, nosotros católicos lo vemos de una cierta manera pero creo realmente que el mundo le mira como una guía”.

ZENIT le preguntó si su fe les ayudó. “Sí --responde-- pero debo decir que no sé cómo se puede ir adelante en la vida sin la fe. Es algo a lo que te aferras”.

“Pienso que el Papa sea una esperanza, un faro para el mundo. Está con los pies en la tierra, observa muchos de los problemas del mundo, habla de una forma en la que todos podemos relacionarnos y nos da un cierto consuelo”.

Otro hombre, perdió a su hermana Debora en el Pentágono. En el momento en el que él y su mujer comenzaron a hablar con nosotros, la señora muestra el reflejo de la Torre de la Libertad en su smartphone, mostrando cómo sea realmente el reflejo de una cruz.

Otro pariente de un fallecido, que prefirió permanecer en el anonimato, dice: “ha sido un día muy significativo para mí. El papa Francisco ha venido con un mensaje de alegría”.